Aquí es donde el “schrootmolen”, o “molino de malta”, hacía la molienda. Los granos de malta se aplastaban y molían para conseguir cebada malteada. Junto con el agua, este grano molido es el ingrediente más importante en el proceso de elaboración de la cerveza. Hoy en día, este amplio salón con su barra de madera elaborada a la perfección tiene capacidad para una recepción de 250 personas o una cena de 130. También se puede utilizar como un teatro para 60 personas o espacio de forma en U para 32.